¿Cuántos de esos "pensadores" han engordado a la bestia que hoy galopa por Estados Unidos y por España? Ante la caída en su día del muro de Berlín, ellos, insisto, esos "pensadores" (dioses de andar por casa, a veces de andar por cuevas), comenzaron a pergeñar el objetivo de poner fin al capitalismo, democracia liberal, todo ello más importante, creían, que la defunción del muro de la vergüenza, con san Juan Pablo II, Thatcher y Reagan de protagonistas. Y ahora avisan, advierten, pronostican que de no parar a los vándalos (sus hijos) el mundo irá a la ruina. Ay, Salman Rushdie, creo que mi Tomás de Kempis habló del silencio y la humildad como aliados del hombre libre. En fin.
----------------------------------------------------
----------------------------------------------------
Populacho con derecho a voto. El mal está ahí. Mientras Pablo Iglesias tenga al populacho de su parte, o sea, al vulgo, hombre-masa orteguiano, no hay columna de periódico ni charleta en radio que pueda evitar la consolidación del horror. Bares abiertos y ningún país del mundo iguala el número de tales nichos-establecimientos por metro cuadrado. Todo el mundo a votar, cuando toque; si alguna vez toca, más allá de Galicia y Vascongadas. ¿Si el CNI es la segunda casa de Iglesias, por qué los medios de comunicación van a resistirse a cohabitar con el macho alfa de la manada democrática?
----------------------------------------------------
La inviolabilidad de la Corona es aberrante.
El linchamiento también.
----------------------------------------------------
La cacería a los periodistas, al igual que las cloacas, son consustanciales a la democracia liberal.
Diputados, alcaldes, concejaluchos de toda ralea, empresarios, el vulgo fanatizado; siempre ha habido gentuza que dispara contra los medios privados y los periodistas.
A veces olvidamos que la corrupción está muy arraigada en el periodismo; que ese mismo periodismo se endiosa y se niega a aceptar la crítica.
El periodismo se muere porque al igual que la democracia liberal, ambos tienen muchos males agudos, negándose los dos por igual a pasar por el quirófano.
Pero el matonismo de la izquierda, no solo española, sino también global, es demencial y condenable.
Repulsiva la persecución ordenada por líderes que representan el horror de ideologías que portan la muerte desde que nacieron.
El vicepresidente tercero del gobierno de Pedro Sánchez es un peligro real para la libertad de prensa. Y lo es Pablo Echenique, Alberto Garzón, Irene Montero, Juan Carlos Monedero, y periodistas que trabajan despatarrados y a las órdenes del horror, que nunca error.
--------------------------------------------------------
Comentarios
Publicar un comentario